19 de septiembre de 2022
Este 19 de septiembre, es el día que jamás podrá borrarse de la historia de nuestra memoria, es un día que marcó al país en dos diferentes años debido a los temblores que dejaron dolor y tragedia entre los mexicanos en 1985 y recientemente en 2017.
El 19 de septiembre de 1985, la Ciudad de México sufrió un sismo de 8.1 en escala de Richter, provocó 10,000 personas fallecidas y 30,000 heridos, y causó una pérdida estimada de 4,000 millones de dólares.
Ese día el terremoto sacudió a México a las 07:19 horas, cuando las personas se preparaban para ir a sus trabajos o a la escuela.
El epicentro se localizó en el océano Pacífico, cerca de la desembocadura del río Balsas, en las costas del estado de Michoacán, y el hipocentro, a 15 kilómetros de profundidad bajo la corteza terrestre.
Hubo daños estructurales en los principales centros políticos, culturales y comerciales del país.
Muchos grupos civiles se presentaron a realizar actividades de rescate o apoyo a centros de salud, ofreciendo de manera espontánea alimentos, asistencia y refugio.
La historia se repitió 32 años después, justo a las 13:14 horas dónde, la cifra oficial fue de 369 muertos, con unos 250.000 damnificados y más de 180.000 viviendas que sufrieron daños con un terremoto de magnitud 7,1.
El Centro Nacional de Prevención de Desastres ha dicho que «no existe persona o institución capaz de predecir la fecha hora, lugar e intensidad de un sismo», pero sí es necesario prepararse para un evento natural que ocurren sin previo aviso.
En Guerrero, de acuerdo a autoridades de ese año, el siniestro dejó saldo de tres personas fallecidas, 15,000 personas damnificadas y al menos 7,800 viviendas con diversos daños en 40 de los 81 municipios de la entidad.
En cuanto a Infraestructura Física Educativa en Acapulco se tiene el registro de 13 planteles con daños severos, 30 con daños menores, y 33 con daños moderados.
Se reportó que 13 centros religiosos sufrieron afectaciones, la mayoría catalogados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) como centros arquitectónicos especiales y culturales.
Hubo además 69 afectaciones carreteras y diversos daños más como fugas de gas, postes caídos, entre otros.
En la actualidad, a 32 años de distancia del primer sismo y cinco del segundo siniestro, se sigue haciendo el llamado a la ciudadanía a estar preparados ante un nuevo siniestro, el cual a la fecha resulta imposible de predecir, más aún por la alta zona sísmica dónde se encuentra Guerrero en el globo terráqueo.