22 de agosto de 2022/ Eduardo Salgado Sánchez
Este 22 de agosto se conmemora en México el Día del Bombero, héroe sin capa siempre al servicio de la población, aunque con carencias y el riesgo de perder la vida.
Su nombre es Raúl Pérez Romero y desde hace trece años dedica su vida a ser bombero, un trabajo 27/7 al servicio de la sociedad acapulqueña. Su mayor satisfacción dice, es la de ayudar a quien así lo necesite.
La inquietud y amor a su trabajo, lo adoptó de su señor padre don Raúl Pérez de la O, quién por más de 30 años formó parte del Heroico Cuerpo de Bomberos del puerto de Acapulco.
De sacrificios y satisfacciones así define su trabajo en una charla con el que suscribe: sacrificios por no estar presente en las ocasiones especiales con las familia, como en la festividades de fin de año, ya que dicho sea de paso, son los días donde más se incrementan los incidentes por el manejo de pirotecnia o incendios en casa por sobrecargas eléctricas.
Pero también define que las satisfacciones son mayores, por la oportunidad que representa el ayudar a la sociedad aún y cuando esto conlleve a poner en riesgo su propia vida.
De sus experiencias, recuerda un incidente de una pipa de gas siniestrada en la comunidad de Bajos del Ejido, que tomó varias horas y pipas para poder sofocarla, con el latente el riesgo de una explosión, que afortunadamente no se dio, evitándose una catástrofe.
Raúl Pérez se dijo contento por ser el orgullo de su esposa e hijos, quienes entienden el papel que juega no sólo en incendios, si no en rescate de animales, fugas de gas, atención al en accidentes automovilísticos con equipo de rescate, atención a enjambres de abejas, solo por mencionar algunos.
De manera humilde, pidió a la población atender siempre las recomendaciones de Protección Civil que puedan evitar algún siniestro y en caso de emergencia, al conducir tener conciencia en ceder el paso para llegar a un punto donde posiblemente, una persona o familia esté en riesgo de perder la vida.